Teresa Sánchez
Sábado, 30, Noviembre, 2024
BaloncestoNoticias 24 horas
No es la primera vez esta temporada que en el pabellón de Würzburg se viven minutos de parón durante los partidos de Perfumerías Avenida por fallos en la iluminación, en particular la del sistema de marcadores. La última vez fue en el partido ante Casademont Zaragoza cuando alguien tocó un cable que no debía pero se solucionó rápido, mucho antes que en este duelo ante Lointek Gernika en el que el problema fue que en el primer cuarto, uno de los luminosos del tiempo de posesión se quedaba permanentemente encendido sin posibilidad de apagarlo para continuar el juego.
Un primer parón se alargó durante más de diez minutos, lo que obligó a las jugadoras a volver a calentar. Cuando se reanudó el juego tardó apenas dos posesiones en repetirse el fallo y al final se optó por jugar el resto del encuentro sin luz y sonido de fin de posesión en uno de los aros ante el riesgo de que estuviera atascándose continuamente.
Incidencia que los aficionados, que volvieron a llenar el pabellón, llevaron con resignación. Menos paciencia tuvieron a medida que avanzaba el duelo en un segundo cuarto repleto de parones, esta vez por las continuas faltas con las que se castigaba al equipo local lo que acabó por encender los ánimos antes del descanso.
Y como el duelo estaba destinado a ser eterno, en la segunda mitad también hubo sus parones, esta vez no por la luz si no por las pegatinas del parqué que se levantaban de manera continua hasta que se optó por la solución más efectiva y segura: Tirón, fuera de la pista y a jugar.